Quiero compartir la siguiente reflexión con vosotros ya que esta semana nos ha sobrecogido el video “El experimento sobre horarios laborales” cuyo objetivo es hacernos pensar acerca de la cantidad de horas que los niños dedican a la escuela, entre la jornada lectiva y los deberes en casa.
¿Por qué debemos complementar la asimilación de contenidos con interminables ejercicios, listas de memoria, resúmenes, etc.? A mi modo de ver, la respuesta es muy simple. Porque los humanos aprendemos y asimilamos todo mejor si lo hacemos, si comprobamos para que sirve y por supuesto mantenemos ese conocimiento si lo utilizamos.
Es por eso que muchos ya estamos implementando con éxito el “learning by doing” o aprender haciendo. Su eficacia radica en que el alumno se siente motivado porque experimenta, juega. Esta actitud y predisposición entusiasta son las óptimas para adquirir nuevos conocimientos y lo que es aún mejor, llevan a querer descubrir algo más.
¿No es así acaso, cómo evolucionamos?